Además de tener una organización excelente y un recorrido maravilloso, la I CxM Sierra Blanca ha otorgado premios estupendos, el más importante para mí, la medalla finisher a todos los corredores que terminaron la prueba, que aunque no tenga un valor monetario extraordinario estoy seguro de que el valor emocional para todos los que obtuvimos una es incalculable.
Además, se entregó un queso de rueda al corredor más veterano de la prueba (el incombustible "Súper Paco"), un trofeo conmemorativo de cristal para los 3 primeros clasificados en las respectivas categorías y premios especiales para los mismos.
En mi caso, por obtener la primera posición en la categoría promesa, se me hizo entrega de un vale para recoger unas zapatillas en una tienda de Marbella, Trekking & Running, que no he conocido hasta esta misma tarde cuando he ido a retirar el premio.
En mi caso, por obtener la primera posición en la categoría promesa, se me hizo entrega de un vale para recoger unas zapatillas en una tienda de Marbella, Trekking & Running, que no he conocido hasta esta misma tarde cuando he ido a retirar el premio.
Al igual que cuando corrí el Cross de San Pedro comenté el gran servicio que recibí en Dálguez Sport al comprar las Inov Oroc esa misma semana, he visto oportuno comentar el impecable trato al cliente que he recibido en esta tienda, que además ha sido muy anecdótica desde el punto de vista personal.
Recuerdo, de nuevo, que soy un corredor popular, por lo que no tengo patrocinadores ni me pagan por publicitar una marca o producto, hablo desde mi punto de vista y en mi opinión, si recomiendo algo es porque de verdad pienso que vale la pena.
Lo primero que me llamó la atención, ya antes de entrar, fue que hubiese Fivefingers expuestas en la tienda, aunque debo admitir que sospeché que por fin me encontraría con ellas en una tienda física en España (en Suiza ya había visto alguna tienda con diferentes modelos con suela Vibram) al ver el logotipo de la marca italiana de suelas en el sobre del premio.
Una vez dentro lo primero que me sorprendió fue que el hilo musical fuese de Supersubmarina, uno de mis grupos favoritos (que nunca había oído en ningún comercio), pero no sería la primera casualidad de la tarde...
Al mirar hacia el fondo de la tienda me encontré con la que fuera imagen de mi avatar de tuiter durante meses, las huellas enfrentadas de un pie desnudo y un pie calzado con Fivefingers... ¡Y no acabaron ahí las casualidades!
Llevaba, por casualidad también (aunque cada vez me las calzo más a menudo, aunque no vaya a correr), mis Bikila LS, y me sorprendió ver que el encargado de la tienda llevaba su homónimo para trail, las Spyridon (era la primera vez que coincidía con alguien que llevase Fivefingers fuera de una carrera).
Le comenté que iba a recoger el premio, y mientras me atendía le eché una ojeada a la tienda, recordando fugazmente que ya había visto antes a alguien calzando esas zapatillas en acción, y preguntándome si habría sido él.
Terminó de atender a otro cliente y me comentó los modelos que podía recoger con el vale y me probé un par de tallas hasta dar con la mía.
Mientras probaba como me iban y me decidía por una talla u otra estuve charlando con Raúl, el encargado, sobre las Fivefingers, el atletismo, las carreras de trail y pruebas deportivas en general.
Me confirmó que había sido a él a quien había visto en trails como La Capitana o Calamorro y me estuvo comentando algunas de sus experiencias en sus más de dos años corriendo con Fivefingers, lo que me pareció muy interesante ya que, aunque llevo poco tiempo con ellas, uno de mis objetivos es bajar mi récord en la media maratón de Málaga este año, calzándolas.
Me comentó que en trail había tenido algún problema en las bajadas con las Fivefingers, por lo que le recomendé las Merrel (por la experiencia de varios amigos a los que les van muy bien) y me comentó que en breve tendría varios modelos también por la tienda.
La idea me parece genial, ya que es la primera tienda física que conozco en España en las que se vende calzado minimalista.
Ya bastante difícil de por sí es la transición al minimalismo como para enfrentarte a ella sin tener consejos de personas que las usen de primera mano o conozcan el tallaje, como me pasó a mí (aunque tuve suerte en la compra de mis Fivefingers, pese a que me dejasen un recadito en la aduana, y el plan de entrenamiento que me he preparado va funcionando de maravilla).
Las zapatillas que me llevé fueron las Skechers Go bionic trail, modelo minimalista para correr por montaña, he pensado abrir un apartado en el blog en el que valorar las diferentes zapatillas que vaya calzando (cuando lleve al menos 500 kilómetros con ellas y alguna competición, para que la revisión sea consistente), así que ya contaré que tal va me yendo con ellas más adelante.
Raúl y yo nos echamos una foto que mi abuela se encargó de sacar (pese a su mala relación con la tecnología), con la que inmortalizamos el momento, que parece un anuncio publicitario de Fivefingers, modelo asfalto y montaña.
A mi abuela siempre le han hecho gracia los calcetines Toetoe que uso para calzar las Fivefingers (que también compraba hasta ahora desde tiendas extranjeras, ya que no conocía tiendas físicas españolas que vendiesen calcetines de ese tipo), y vio que había unos grises de Vibram expuestos, que decidió regalarme para que "variase" el color de los mismos.
Su cumpleaños es mañana, así que intenté resistirme, pero insistió y se salió con la suya, por lo que pensaré un buen regalo que hacerle yo a ella mañana.
Me despedí de Raúl y le di las gracias por el excelente trato que había recibido, aunque espero verle pronto corriendo de nuevo.
La tarde ha sido de lo más fructífera, he conocido una tienda por la que tengo pensado volver, a un gran atleta, minimalista para más inri (y cada vez somos más) y me llevo a casa un par de zapatillas nuevas y un par de calcetines.
¿Qué más se puede pedir?
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