Características:
Grosor suela: 19 milímetros
Drop: 6 milímetros
Peso: 328 gramos
Nuevamente y al igual que me pasó cuando realicé el análisis de La Sportiva Ultra Raptor, no he podido testar con toda la profundidad que me gusta el modelo, pero sí que he exprimido al máximo la oportunidad.
Tengo que agradecer a La Senda la oportunidad una vez más de probar los modelos de la marca italiana en su II La Sportiva Training Day (Crónica del I La Sportiva Running Day La Senda), especialmente en esta ocasión, ya que he podido testar el modelo con antelación, ya que mañana me es imposible acudir a la quedada, que con total seguridad, será un éxito.
Lo primero que hice tras recogerla fue analizar lo que tenía entre manos; la última vez mis compañeros de club que probaron la Bushido se quejaron de que "se notaba todo", y ya que para mí la Ultra Raptor fue un tanque, sabía que me iba a gustar más este modelo, la elección de modelo fue sencilla.
No sabía cuandos kilómetros tendría el modelo que tenía en mis manos, ya que como par de prueba va rotando por todas las tiendas que colaboran con La Sportiva, y a razón de 10-20 kilómetros por jornada... aun así el único desgaste que podía poner en peligro la durabilidad del modelo era un leve despegue (apenas milímetros) en una de las zonas de la puntera, que con silicona o pegamento de contacto se soluciona sin problema.
Les doy la vuelta y, sorprendentemente, mantiene totalmente el dibujo de la suela, y prácticamente todos los tacos continúan teniendo el grosor suficiente para aguantar la tralla que tenía pensadas para ellas... bueno, habría que comprobarlo...
Las Bushido, sin ser un modelo minimalista, tienen un grosor máximo de suela de 4 milímetros menos que las Ultra Raptor, un drop de 6 milímetros (por 8 de las Raptor) y pesan 328 gramos en modelo 44, 22 menos que sus compañeras.
Acostumbrado a correr desde hace algo más de 3 semanas únicamente con huaraches, como las Luna Sandals Oso, las Pies Sucios Simna 3 y las Pies Sucios Nunche 2 (de las que próximamente comentaré mis primeras impresiones), fue extraño volver a "encerrar" mis pies en unas zapatillas, pero si nunca me hubiese atrevido a probar las Fivefingers nunca hubiese descubierto el minimalismo... ¡hay que probarlo todo!
Pese a que me notaba lastrado en los primeros metros con ellas, rondaba 5 minutos el kilómetro sin gran dificultad mientras me dirigía hacia Los Pacos; ascendería por Buenavista hasta Mijas, donde bebería agua en la fuente, continuaría hasta la cantera y volvería a La Senda, donde devolvería el modelo, recorrido que esperaba recorrer en algo menos de 2 horas.
Pese a ser un modelo específico de montaña, me sentía muy cómodo en asfalto, traccionaban bien y podía expandir ligeramente los dedos, ya que el upper es un poco más ancho que el de las Ultra Raptor (aunque podría ser aún más ancho).
Del cuarto al quinto kilómetro ascendí 76 metros, en la última parte ya por carril.
Me resultaron muy cómodas para avanzar, facilitando el apoyo de puntillas, y tan solo notaba un poco de roce en el tobillo izquierdo, que con unos calcetines algo más gruesos, sin duda, sería imperceptible (hacía días que no me ponía calcetines..).
Llegando a la zona más técnica fui muy pendiente por si necesitaba ajustar el ritmo, ya que algunas pendientes alcanzaban el 23% en tramos de varios metros, con terreno muy seco, polvoriento y resquebradizo, pero salvo un derrape imprevisto, que achaco al desgaste previo de las zapatillas, la montaña se encargaba de regular mi velocidad, y no el miedo a un posible derrape.
La subida por Buenavista es un recorrido muy recurrente, que en otra época llegaba a efectuar hasta en 2 ocasiones a la semana, por lo que tengo referencias de paso en varios puntos; mis mejores tiempos de subida en el tramo de Buenavista eran de 7:20 y 7:22, y esta mañana, sin proponérmelo, pasé por 7:13, estableciendo el 5º mejor tiempo global de subida según las estadísticas de Strava.
Igualmente en la subida global tenía un mejor tiempo de 52:30, y esta mañana llegué a la A-368 en 50:19, sin forzar en absouto, lo que reflejaba el buen paso que me permitían llevar las zapatillas y la seguridad con la que ascendía por todo tipo de terrenos; también influye que la semana pasada superase mi mejor marca en 10 kilómetros en la Carrera Familiar Solidaria de Fuengirola, las zapatillas no corren solas.
Pese a que me siento más cómodo conforme más cerca del suelo corro, percibía feedback de las superficies por las que corría, nada que ver con calzar huaraches o calzado específico minimalista para montaña, como las Merrel Trail Glove 3 (ya subiré un día a la sierra a completar su análisis), pero por contra, al aterrizar de forma inesperada sobre piedras con esquirlas, no sentía molestia alguna.
Pienso que el modelo tiene un equilibrio muy bueno entre protección y propiocepción, aunque se decanta más hacia el primer extremo, pero aun así creo que tanto corredores acostumbrados a calzado minimalista como los acostumbrados a correr con calzado tradicional pueden valorar muy positivamente este modelo.
Tras repostar en la fuente de Mijas tocaba subir a la cantera, bastante fresco muscularmente hablando, pero el calor me estaba dejando machacado y en algunos tramos (al igual que en las pendientes de tierra más duras) tuve que echar a andar.
La bajada fue una delicia, sintiéndome en todo momento muy seguro y con la pendiente a favor, mejorando todos mis registros de tiempos parciales en bajada.
A escasos 7 kilómetros de completar la sesión, no obstante, comencé a notar molestias en el empeine izquierdo, fruto de la presión de la zapatilla, a la que comienzo a no estar acostumbrado, por lo que tuve que bajar el ritmo, de un 3:30 minutos el kilómetro clavados disfrutando con pendiente y viento a favor a ritmos más cercanos a 4, y una vez en llano, superiores a 5.
Me ayudó mucho también el bajar el ritmo para mitigar esta molestia, y ya en los dos últimos kilómetros comenzó también a molestarme un poco la zona de los dedos del pie derecho, debido a la presión que soportaron contra la zapatilla en bajada.
Finalmente acabé la sesión en 1:58:57, contando una parada para beber agua, la estimación de la duración fue casi exacta.
Han sido poco más de 21 kilómetros, por lo que solo he podido extraer una sutil pincelada del rendimiento y prestaciones de la zapatilla, pero comparto lo que, a mi juicio, me ha gustado más y menos.
Lo peor:
-Por algún extraño motivo (quizás el roce del calcetín), en la bajada notaba una sensación de calor bastante molesta en las plantas de los pies.
-Pese a que su "abrazo" no es tan extremo como el de las Ultra Raptor, en la parte final de la sesión me notaba un poco agobiado.
-La impermeabilidad del modelo deja bastante que desear, ya que al beber en la fuente de Mijas el agua salpicaba y en la zona de la membrana donde me cayó agua acabó calando tras un par de minutos.
Lo mejor:
-El balance propiocepción/protección es muy positivo, aunque eché en falta el refuerzo en la puntera al golpear por sorpresa una piedra semi enterrada en un tramo arenoso; de haber ido con huaraches probablemente me hubiese tenido que despedir de la uña, pero aunque sigue entera, aun me duele si me aprieto con el dedo.
-La tracción ha sido muy buena tanto en bajada como en subida, pese al desgaste de la suela, por lo que preveo que es un tipo de calzado que aguanta muy bien el kilometraje y puede ser muy útil en largas distancias.
-La lengüeta es fenomenal, y al estar muy ajustada al tobillo (sin llegar a molestar), pese a haber corrido sin polainas y por terreno muy arenoso y con muchos guijarros y piedras sueltas, no ha penetrado ningún elemento extraño en el interior de la zapatilla.
De nuevo, gracias a La Senda por confiar en mí para probar el modelo, es una pena que no pueda asistir a la sesión en "familia", pero espero poder acudir a más de una de las actividades del campus que organizáis la semana que viene (para los que no os hayáis enterado, os dejo la info).
¡Un abrazo!
Tengo que agradecer a La Senda la oportunidad una vez más de probar los modelos de la marca italiana en su II La Sportiva Training Day (Crónica del I La Sportiva Running Day La Senda), especialmente en esta ocasión, ya que he podido testar el modelo con antelación, ya que mañana me es imposible acudir a la quedada, que con total seguridad, será un éxito.
Lo primero que hice tras recogerla fue analizar lo que tenía entre manos; la última vez mis compañeros de club que probaron la Bushido se quejaron de que "se notaba todo", y ya que para mí la Ultra Raptor fue un tanque, sabía que me iba a gustar más este modelo, la elección de modelo fue sencilla.
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| El modelo de prueba, con infinidad de kilómetros encima |
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| La suela, desgastada pero manteniendo dibujo y tacos |
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| Realizando "antropometría" zapateril... (podemos ver la zona de puntera despegada) |
Las Bushido, sin ser un modelo minimalista, tienen un grosor máximo de suela de 4 milímetros menos que las Ultra Raptor, un drop de 6 milímetros (por 8 de las Raptor) y pesan 328 gramos en modelo 44, 22 menos que sus compañeras.
Acostumbrado a correr desde hace algo más de 3 semanas únicamente con huaraches, como las Luna Sandals Oso, las Pies Sucios Simna 3 y las Pies Sucios Nunche 2 (de las que próximamente comentaré mis primeras impresiones), fue extraño volver a "encerrar" mis pies en unas zapatillas, pero si nunca me hubiese atrevido a probar las Fivefingers nunca hubiese descubierto el minimalismo... ¡hay que probarlo todo!
Pese a ser un modelo específico de montaña, me sentía muy cómodo en asfalto, traccionaban bien y podía expandir ligeramente los dedos, ya que el upper es un poco más ancho que el de las Ultra Raptor (aunque podría ser aún más ancho).
Del cuarto al quinto kilómetro ascendí 76 metros, en la última parte ya por carril.
Me resultaron muy cómodas para avanzar, facilitando el apoyo de puntillas, y tan solo notaba un poco de roce en el tobillo izquierdo, que con unos calcetines algo más gruesos, sin duda, sería imperceptible (hacía días que no me ponía calcetines..).
Llegando a la zona más técnica fui muy pendiente por si necesitaba ajustar el ritmo, ya que algunas pendientes alcanzaban el 23% en tramos de varios metros, con terreno muy seco, polvoriento y resquebradizo, pero salvo un derrape imprevisto, que achaco al desgaste previo de las zapatillas, la montaña se encargaba de regular mi velocidad, y no el miedo a un posible derrape.
La subida por Buenavista es un recorrido muy recurrente, que en otra época llegaba a efectuar hasta en 2 ocasiones a la semana, por lo que tengo referencias de paso en varios puntos; mis mejores tiempos de subida en el tramo de Buenavista eran de 7:20 y 7:22, y esta mañana, sin proponérmelo, pasé por 7:13, estableciendo el 5º mejor tiempo global de subida según las estadísticas de Strava.
Igualmente en la subida global tenía un mejor tiempo de 52:30, y esta mañana llegué a la A-368 en 50:19, sin forzar en absouto, lo que reflejaba el buen paso que me permitían llevar las zapatillas y la seguridad con la que ascendía por todo tipo de terrenos; también influye que la semana pasada superase mi mejor marca en 10 kilómetros en la Carrera Familiar Solidaria de Fuengirola, las zapatillas no corren solas.
Pese a que me siento más cómodo conforme más cerca del suelo corro, percibía feedback de las superficies por las que corría, nada que ver con calzar huaraches o calzado específico minimalista para montaña, como las Merrel Trail Glove 3 (ya subiré un día a la sierra a completar su análisis), pero por contra, al aterrizar de forma inesperada sobre piedras con esquirlas, no sentía molestia alguna.
Pienso que el modelo tiene un equilibrio muy bueno entre protección y propiocepción, aunque se decanta más hacia el primer extremo, pero aun así creo que tanto corredores acostumbrados a calzado minimalista como los acostumbrados a correr con calzado tradicional pueden valorar muy positivamente este modelo.
Tras repostar en la fuente de Mijas tocaba subir a la cantera, bastante fresco muscularmente hablando, pero el calor me estaba dejando machacado y en algunos tramos (al igual que en las pendientes de tierra más duras) tuve que echar a andar.
La bajada fue una delicia, sintiéndome en todo momento muy seguro y con la pendiente a favor, mejorando todos mis registros de tiempos parciales en bajada.
A escasos 7 kilómetros de completar la sesión, no obstante, comencé a notar molestias en el empeine izquierdo, fruto de la presión de la zapatilla, a la que comienzo a no estar acostumbrado, por lo que tuve que bajar el ritmo, de un 3:30 minutos el kilómetro clavados disfrutando con pendiente y viento a favor a ritmos más cercanos a 4, y una vez en llano, superiores a 5.
Me ayudó mucho también el bajar el ritmo para mitigar esta molestia, y ya en los dos últimos kilómetros comenzó también a molestarme un poco la zona de los dedos del pie derecho, debido a la presión que soportaron contra la zapatilla en bajada.
Finalmente acabé la sesión en 1:58:57, contando una parada para beber agua, la estimación de la duración fue casi exacta.
Han sido poco más de 21 kilómetros, por lo que solo he podido extraer una sutil pincelada del rendimiento y prestaciones de la zapatilla, pero comparto lo que, a mi juicio, me ha gustado más y menos.
Lo peor:
-Por algún extraño motivo (quizás el roce del calcetín), en la bajada notaba una sensación de calor bastante molesta en las plantas de los pies.
-Pese a que su "abrazo" no es tan extremo como el de las Ultra Raptor, en la parte final de la sesión me notaba un poco agobiado.
-La impermeabilidad del modelo deja bastante que desear, ya que al beber en la fuente de Mijas el agua salpicaba y en la zona de la membrana donde me cayó agua acabó calando tras un par de minutos.
Lo mejor:
-El balance propiocepción/protección es muy positivo, aunque eché en falta el refuerzo en la puntera al golpear por sorpresa una piedra semi enterrada en un tramo arenoso; de haber ido con huaraches probablemente me hubiese tenido que despedir de la uña, pero aunque sigue entera, aun me duele si me aprieto con el dedo.
-La tracción ha sido muy buena tanto en bajada como en subida, pese al desgaste de la suela, por lo que preveo que es un tipo de calzado que aguanta muy bien el kilometraje y puede ser muy útil en largas distancias.
-La lengüeta es fenomenal, y al estar muy ajustada al tobillo (sin llegar a molestar), pese a haber corrido sin polainas y por terreno muy arenoso y con muchos guijarros y piedras sueltas, no ha penetrado ningún elemento extraño en el interior de la zapatilla.
De nuevo, gracias a La Senda por confiar en mí para probar el modelo, es una pena que no pueda asistir a la sesión en "familia", pero espero poder acudir a más de una de las actividades del campus que organizáis la semana que viene (para los que no os hayáis enterado, os dejo la info).
¡Un abrazo!
Excelente análisis.
ResponderEliminar¡Gracias Edgar!
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