Recientemente varios amigos y conocidos me han preguntado cual es mi motivación para salir a correr cada día y cómo les podría ayudar a correr de forma habitual.
La primera respuesta es obvia, porque me gusta y disfruto de cada kilómetro, pero la segunda es mucho mas complicada, sobre todo porque en personas sedentarias y que nunca han disfrutado practicando deporte el correr puede causar aversión al principio.
Por ello, este artículo va dedicado a todas esas personas a las que les gustaría empezar a correr pero no se atreven a dar el paso, sea por vergüenza, por temor a "asfixiarse" y tener que parar nada más comenzar o por cualquier otra causa.
-¡Prepara tu equipo! dependiendo de lo que quieras gastar puedes comprar ropa técnica o usar ese viejo chándal que tienes por casa; lo importante es estar cómodo, sobre todo, con el calzado.
-¡Busca compañía! siempre es mucho más divertido y sencillo correr en grupo y con la cantidad de tiendas de deporte, grupos de Facebook y Apps, seguro que no te cuesta encontrar alguien con quien compartir zancadas.
-¡Márcate un objetivo! la carrera de tu pueblo, una milla cercana... busca el que más te motive (con realismo, no recomendaría nada superior a 5 km) y no busques otro objetivo hasta finalizarlo; si continúas corriendo durante un año y tienes ocasión de repetir alguna de estas pruebas, ¡verás que gran diferencia en cuanto tiempo y sensaciones!
-¡No te obsesiones con los datos! Recomendaría comenzar saliendo 2-3 veces por semana, por ejemplo, dos días 5 minutos corriendo hasta donde llegues y volver y el tercero 10 minutos y vuelta, subiendo un minuto a cada salida semana a semana hasta llegar a la media hora.
-¡Sal de tu zona de comfort! aunque hayas hecho deporte con anterioridad, si hace mucho tiempo que no lo practicas, en cuestión de pocos minutos puede que empiecen a dolerte partes de tu cuerpo que ni si quiera recuerdas; ¡lucha por cumplir tu objetivo!
-¡Cíñete al plan! es muy difícil mantener la constancia durante las primeras 4-6 semanas, pero si aguantas, la mejora va a ser increíble; salvo causa de fuerza mayor, intenta salir cada uno de los días que te habías propuesto y recuerda que es mejor comenzar con un plan básico que con uno demasiado exigente.
-¡Registra tus logros! coloca un calendario en un lugar visible y anota con un gran círculo aquellos días en los que sales a correr, el tiempo invertido, los kilómetros... aquello que más te motive a seguir añadiendo marcas al calendario.
-¡Descansa! el descanso es también parte del entrenamiento, aunque te sientas lleno de vigorosidad, si la sesión es de 20 minutos, acábala en 20 y si te toca descanso, no salgas a correr aunque te apetezca, pues corres el riesgo de quemarte.
-¡En la variedad está el gusto! Si siempre haces el mismo tipo de entrenamiento es posible que acabes aburriéndote, así que si tienes ocasión, cambia el recorrido, mete cuestas, alguna salida por campo, cambios de ritmo...
-¡Usa juegos mentales en los momentos difíciles! la cabeza manda sobre el cuerpo y si eres capaz de distraer la mente, los kilómetros pasarán mucho más rápidos; correr con música o hacer cálculos matemáticos de ritmos o distancias suelen ser buenas opciones.
-¡Busca la motivación si no la encuentras! Películas, libros, revistas, blogs, grupos de Facebook... para alguien que lleve mucho tiempo sin hacer deporte o no lo haya hecho nunca cada salida es un logro y mantener al menos 2-3 semanales puede ser duro en ocasiones (cansancio, climatología, trabajo...) ¡pero siempre hay 10 minutos que puedes "robar" para correr!
-Por último, si de verdad quieres disfrutar de correr, no concibas correr como un medio para lograr un objetivo (perder peso, hacer marca para una oposición, ganarle a tu cuñado en una carrera...), ya que una vez que lo alcances no querrás volver a correr; para disfrutar corriendo, correr tiene que ser el fin en sí mismo, cuesta de entender, pero los que llevan tiempo corriendo saben a que me refiero.
Para cualquier duda, consejo o sugerencia, no dudéis en dejarme un comentario, estaré encantado de ayudaros.
¡Un abrazo!
La primera respuesta es obvia, porque me gusta y disfruto de cada kilómetro, pero la segunda es mucho mas complicada, sobre todo porque en personas sedentarias y que nunca han disfrutado practicando deporte el correr puede causar aversión al principio.
Por ello, este artículo va dedicado a todas esas personas a las que les gustaría empezar a correr pero no se atreven a dar el paso, sea por vergüenza, por temor a "asfixiarse" y tener que parar nada más comenzar o por cualquier otra causa.
-¡Prepara tu equipo! dependiendo de lo que quieras gastar puedes comprar ropa técnica o usar ese viejo chándal que tienes por casa; lo importante es estar cómodo, sobre todo, con el calzado.
-¡Busca compañía! siempre es mucho más divertido y sencillo correr en grupo y con la cantidad de tiendas de deporte, grupos de Facebook y Apps, seguro que no te cuesta encontrar alguien con quien compartir zancadas.
-¡Márcate un objetivo! la carrera de tu pueblo, una milla cercana... busca el que más te motive (con realismo, no recomendaría nada superior a 5 km) y no busques otro objetivo hasta finalizarlo; si continúas corriendo durante un año y tienes ocasión de repetir alguna de estas pruebas, ¡verás que gran diferencia en cuanto tiempo y sensaciones!
-¡No te obsesiones con los datos! Recomendaría comenzar saliendo 2-3 veces por semana, por ejemplo, dos días 5 minutos corriendo hasta donde llegues y volver y el tercero 10 minutos y vuelta, subiendo un minuto a cada salida semana a semana hasta llegar a la media hora.
-¡Sal de tu zona de comfort! aunque hayas hecho deporte con anterioridad, si hace mucho tiempo que no lo practicas, en cuestión de pocos minutos puede que empiecen a dolerte partes de tu cuerpo que ni si quiera recuerdas; ¡lucha por cumplir tu objetivo!
-¡Cíñete al plan! es muy difícil mantener la constancia durante las primeras 4-6 semanas, pero si aguantas, la mejora va a ser increíble; salvo causa de fuerza mayor, intenta salir cada uno de los días que te habías propuesto y recuerda que es mejor comenzar con un plan básico que con uno demasiado exigente.
-¡Registra tus logros! coloca un calendario en un lugar visible y anota con un gran círculo aquellos días en los que sales a correr, el tiempo invertido, los kilómetros... aquello que más te motive a seguir añadiendo marcas al calendario.
-¡Descansa! el descanso es también parte del entrenamiento, aunque te sientas lleno de vigorosidad, si la sesión es de 20 minutos, acábala en 20 y si te toca descanso, no salgas a correr aunque te apetezca, pues corres el riesgo de quemarte.
-¡En la variedad está el gusto! Si siempre haces el mismo tipo de entrenamiento es posible que acabes aburriéndote, así que si tienes ocasión, cambia el recorrido, mete cuestas, alguna salida por campo, cambios de ritmo...
-¡Usa juegos mentales en los momentos difíciles! la cabeza manda sobre el cuerpo y si eres capaz de distraer la mente, los kilómetros pasarán mucho más rápidos; correr con música o hacer cálculos matemáticos de ritmos o distancias suelen ser buenas opciones.
-¡Busca la motivación si no la encuentras! Películas, libros, revistas, blogs, grupos de Facebook... para alguien que lleve mucho tiempo sin hacer deporte o no lo haya hecho nunca cada salida es un logro y mantener al menos 2-3 semanales puede ser duro en ocasiones (cansancio, climatología, trabajo...) ¡pero siempre hay 10 minutos que puedes "robar" para correr!
-Por último, si de verdad quieres disfrutar de correr, no concibas correr como un medio para lograr un objetivo (perder peso, hacer marca para una oposición, ganarle a tu cuñado en una carrera...), ya que una vez que lo alcances no querrás volver a correr; para disfrutar corriendo, correr tiene que ser el fin en sí mismo, cuesta de entender, pero los que llevan tiempo corriendo saben a que me refiero.
Para cualquier duda, consejo o sugerencia, no dudéis en dejarme un comentario, estaré encantado de ayudaros.
¡Un abrazo!
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