Tras acabarme el acuarius tocaba volver al coche a dejar las cosas antes de ir a la salida... y tras ese rato en el Bar Caribe sí que hacía frío, pese a que teníamos ya 8 grados, el doble de los que había cuando llegamos al pueblo. Era la tercera vez que visitaba Ubrique, la primera, acompañando a mis padres, hace cerca de 20 años, la segunda a primeros de septiembre, en el transcurso del Reto 1000k por el Apego y ahora, para correr.