Recuperándome aun de las quemaduras (físicamente me encuentro muy bien) y ya sin fiebre, me dispongo a contaros la aventura en la que me embarqué ayer, no sin antes daros un poco de contexto... Finalizadas con sabor agridulce las 48 horas de Murcia , donde los pies me llevaron a dejar de correr muchas horas antes de lo pensado, me apetecía tomarme un "descanso".