VII CP Villa del Torcal Villanueva de la Concepción

Otra semana más teníamos carrera del circuito de Diputación de Málaga, hoy una sola, pero tras correr tocaba conducir hasta Fuengirola para trabajar, ya que tenía turno de 12 a 22, una buena paliza.

Pero eso era problema del Juan del futuro, el del presente ascendía por la Avenida de la Libertad hacia la Plaza Gregorio Fernández "El Panza", donde sería la salida y meta.

Me encontré con Óscar, de los Bichos Runners en la plaza, cuando me dirigía a recoger el dorsal y tras tomarme el pre entreno y pasar por el baño, salimos a calentar con el actual campeón del circuito, del Vélez.

Hoy no estaría Carmona, quien participaba en una prueba de MTB por parejas, se hacía raro hacer el calentamiento sin él, pero en cualquier caso la compañía era buena y recorrimos casi un tercio del circuito antes de dar la vuelta a la plaza.

Muchas caras conocidas calentaban arremolinadas alrededor de la plaza y cuando fue acercándose la hora de la salida, nos colocamos en la línea de salida.

Mientras terminaban de dar el okey para la salida, el speaker comentaba por megafonía que contábamos con la presencia, entre otros favoritos para ganar la prueba, de Javier Arcas, quien ganó la pasada media maratón de Fuengirola con una hora nueve y rondó la hora siete en la de Córdoba.

Busqué a Mayte entre el público y le dije que hoy, yendo todo bien, podría acabar segundo, ya que, como Cristián, Javier está a otro nivel y muy mal tendría que tener el día para que le disputase la posición.

Aun así le tomaría el pulso en el primer kilómetro y tras el pistoletazo y aprovechando la pendiente a favor, me pegué a él.

Se nos unió un corredor de rojo al que no había visto nunca y no tenía pinta de ceder, ya que pasamos el primer kilómetro por debajo de 3 minutos (yo en 2:54, ellos al menos un segundo o dos más rápido) y ya iba tirando de Javi.

Me sorprendió el ritmo porque me encontraba cómodo, pero viendo el panorama sabía que salvo que los de delante petasen, sería imposible alcanzarlos y si los seguía, el que petaría sería yo y en breve, por lo que bajé un punto el ritmo mientras se alejaban poco a poco.

Escuchaba pasos muy de cerca, así que estuve pendiente por si me alcanzaban para pegarme, pero por el momento continuaba en solitario.

Tras dejar atrás una buena cuesta entramos en el carrileo, con la cabeza de carrera ya fuera del alcance de la vista y los pasos por detrás cada vez más cercanos.

Con la mayoría del desnivel positivo ya en el cuerpo y tras llanear un poco, empezamos a bajar a buen ritmo.

Entramos en la carretera de Villanueva y al girar vi a Pepo por el rabillo de ojo bastante cerca y mientras bajaba alargando la zancada por el carril paralelo a la calzada me sorprendió que sus pasos eran cada vez más cercanos.

Tan cerca estaba que al final me acabó sobrepasando, a mitad de bajada, así que apreté un poco el ritmo para que no se me fuese.

Le veía muy entero y de hecho él mismo dijo de apretar el ritmo llegando al Parque Antonio Bolívar, en la entrada del pueblo, pero cuando empezaron las cuestas le gané poco a poco la posición.

En la subida por Calle Jaén estaba su madre esperando para animarnos (sobre todo a él, como es lógico) y aunque sabía que estaba a apenas un par de metros, me quedaba aún una última marcha.

Aunque sea echarme piedras sobre mi tejado porque Pepo está muy fuerte y a este ritmo me acabará ganando en próximas carreras, creo que si hubiese guardado el cambio de ritmo para el último kilómetro, hubiésemos llegado a la par a meta y podría haberme adelantado.

Llegamos a la Calle Juan Carlos I y engrané la última marcha sin mirar atrás, dejándome la piel en el sprint final y completando el último kilómetro en 3:47 pese al desnivel.

24:33, tercera posición absoluta y primera senior en la carrera con más nivel del circuito hasta el momento, con David Arcas en segunda posición y resultando campeón el corredor de rojo, que por lo visto es de Barcelona.

Nada más cruzar por meta felicité a Pepo, que llegó justo detrás y me dirigí a la mesa de retirada de dorsales a avisar de que me tenía que ir a trabajar, ya que entraba a las 12, y que seguramente Óscar me recogería el trofeo.

Finalmente se haría con él David Porcuna, del San Pedro, que además me hizo el favor de acercármelo todo al trabajo por la tarde (Óscar fue cuarto, por lo que tenía que volver a casa).

La semana que viene toca descanso, que con Semana Santa no dejan organizar carreras, pero volveremos con todo dentro de dos semanas, hasta entonces ;)