Otro año más, y con este hacían once si la memoria no me falla, acudía a la cita con la Carrera Popular Feria de Mijas.
A punto estuve de no acudir este año, ya que estuve mirando la media maratón The Last Man de Cijuela y a punto estuve de apuntarme, pero como Leo empezó la semana malillo, me inscribí a Mijas a última hora.
Inicialmente pensaba hacer como otros años, subir corriendo, hacer la carrera y bajar trotando, pero con Leo malo no me fiaba, así que subí en la furgo y tras saludar a los compañeros del Club Atletismo Fuengirola, salí a reconocer el circuito al trote, ya que este año habría novedades con respecto a otras ediciones.
En efecto este año se había recortado un trozo de subida, pero el recorrido seguía teniendo tramos sinuosos, cuestas, adoquines... y una bajada con una barandilla en medio en la que habría que tener cuidado.
En resumen, una carrera dura pero muy divertida, manteniendo las dos vueltas.
Tras el calentamiento, que me tenía ya sudando profusamente debido a la altísima humedad, bebí un poco y me fui para la salida, ya que quería coger sitio para evitar el tapón en los primeros compases de la carrera.
Con Pablo Comino y Cristian Benítez como favoritos no tenía presión ninguna, así que correría mi carrera y al acabar, para casa.
También estaban Antonio Ventsislavov, que ya me ganó en el 5000 del Arroyo de la Miel en pista en San Juan y se veía fino, así como corredores que siempre están en forma, como Claudio Sepúlveda, Juanjo Almagro o Antonio Caba, que junto a su hermana Mónica me saludaron en la salida y me pidieron que les mencionase en la crónica.
Con todo el corral de salida preparado y tras el comienzo con un minuto de ventaja del atleta en Handbike (se explicó que habría dos salidas pero hubo corredores que salieron tras él) ya si comenzó la prueba.
En la primera recta me pasaron varios corredores como una exhalación, pero en la cuesta de la Avenida del Compás ya recuperé alguna y parecía que en la subida por la Calle de los Caños la velocidad se estabilizaba.
Nada más lejos de la realidad, en la bajada por la calle del pilar, la de la barandilla, ya Cristian y Pablo se perdían a lo lejos, aunque se iba formando un grupo tras Antonio, que corría en tercera posición en la distancia.
Yo corría cauto, aumentando un punto el ritmo en la subida al Jardín de la Muralla y recuperando en la vertiginosa bajada que nos llevaba de nuevo a la Avenida del Compás y camino a completar la primera vuelta.
En el zigzag previo a la vuelta a la plaza conté seis corredores, por lo que iba en séptima posición y con dos primeros kilómetros casi completados (a 3:31 y 3:27).
Apreté un poquito más el ritmo en la subida hacia la Avenida del Compás, espoleado por los ánimos de los compañeros que se dirigían al zigzag y tras alcanzar a dos corredores que no conocía, me situé tras Juanjo.
Lo cogí antes de la bajada por la Calle del Pilar, en la que divisaba a Antonio al alcance de la vista y pensaba que de las piernas, pero se me perdió en la subida a los jardines de la muralla.
En la bajada hacia la Plaza de la Constitución lo volvía a ver, parecía que a tiro, pero me mantenía reticente a cambiar ya de ritmo porque aun quedaba la bajada de la Avenida del Compás y el zigzag previo a meta.
Allí que me interné tras la bajada con cautela pero apretando ya todo lo que podía tras cada giro y en la vuelta previa a la entrada por meta le empezaba a recortar metros, pero al final me sacó cuatro segundos.
Quizás si hubiese apretado antes lo hubiese podido alcanzar, pero también podía haberme desfondado antes de tiempo y haber perdido posiciones.
Recuerdos especiales para la familia cordobesa de la Escuela Provincial de Atletismo Miguel Ríos, espero que coincidamos pronto.
Al final fui cuarto absoluto y primero de categoría, toda una sorpresa ya que la prueba es muy rápida y no estoy entrenando calidad, pero no me voy a quejar ;)
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